¡Cuidado con los Windows custom!

Los Peligros de los Windows Personalizados

En los últimos años, los Windows personalizados (también conocidos como Windows "modificados" o "Lite") han ganado popularidad entre los usuarios que buscan versiones más ligeras, rápidas o adaptadas a sus necesidades específicas. Estas versiones de Windows, a menudo creadas y distribuidas por terceros, prometen una experiencia optimizada, eliminando funcionalidades que algunos consideran innecesarias o que consumen muchos recursos del sistema.

Sin embargo, esta personalización conlleva riesgos significativos que no siempre son evidentes para los usuarios. A continuación, exploramos los peligros más importantes asociados con estos sistemas operativos.

1. Vulnerabilidades de seguridad

Una de las principales preocupaciones de usar un Windows personalizado es que estas versiones pueden exponer al usuario a importantes riesgos de seguridad. Al ser alteradas por terceros, es difícil saber si se han implementado correctamente todas las actualizaciones de seguridad y parches que Microsoft proporciona regularmente.

En muchos casos, los sistemas operativos modificados pueden tener:

• Componentes de seguridad desactivados (como el firewall o el antivirus de Windows).
• Faltas de actualizaciones esenciales, ya que algunas versiones no permiten recibir actualizaciones automáticas.
• Puertas traseras introducidas por los mismos modificadores, que podrían permitir accesos no autorizados a los datos del usuario.
• Este tipo de descuido puede facilitar la infiltración de malware, ransomware o virus, dejando los datos personales y sensibles en peligro.

2. Problemas de estabilidad y compatibilidad

Al eliminar características o modificar componentes del sistema operativo, se corre el riesgo de afectar la estabilidad del sistema. Estas versiones de Windows están diseñadas para ser más ligeras, pero en el proceso, pueden haber deshabilitado funciones críticas que afectan el rendimiento general.

Los usuarios de Windows personalizados pueden experimentar:

• Caídas frecuentes del sistema.
• Incompatibilidades con ciertos programas o controladores, ya que algunos de ellos dependen de componentes que pueden haber sido eliminados en la versión modificada.
• Problemas al realizar actualizaciones. Algunas versiones personalizadas no permiten actualizar a nuevas versiones de Windows o aplicar parches oficiales, lo que puede generar inconvenientes a largo plazo.

3. Riesgo de malware y software no deseado

Otro de los grandes peligros es que los Windows personalizados a menudo se descargan de fuentes no oficiales o poco confiables, lo que abre la puerta a la posibilidad de que los archivos ya vengan infectados con malware, troyanos u otro tipo de software malicioso.

Incluso si la intención original del creador del Windows personalizado era buena, el hecho de que el software haya pasado por manos no oficiales pone en riesgo su integridad. Además, en muchos casos, estos sistemas operativos pueden venir con software adicional no deseado o publicitario que se instala junto con el sistema.

4. Violación de los términos de uso

Microsoft tiene términos y condiciones claros para el uso de su sistema operativo, y las versiones modificadas generalmente violan esos términos. Esto puede resultar en problemas legales para quienes distribuyen o usan estas versiones, especialmente si se utilizan en entornos empresariales o comerciales.

Además, al usar un Windows personalizado, es posible que pierdas el soporte técnico oficial de Microsoft. Si tienes problemas con el sistema, no podrás contar con asistencia de la empresa, lo que te deja sin respaldo si algo sale mal.

5. Imposibilidad de soporte técnico

Como se mencionó, los Windows modificados no tienen soporte oficial de Microsoft, lo que significa que no se pueden aprovechar los recursos de soporte que se brindan a los usuarios de Windows auténticos. Esto puede incluir tanto las actualizaciones automáticas como el soporte de atención al cliente, dejándote sin opciones en caso de que algo salga mal.

Si necesitas ayuda de la comunidad o técnicos especializados, puede ser difícil encontrar soluciones para problemas que solo se presentan en una versión muy específica de Windows que no es la oficial.

¿Qué hacer, entonces?

Lo mejor, si se tiene un equipo con hardware antigüo o de bajos recursos, sería una actualización de partes del sistema entre las que se encuentra muy comúnmente los dispositivos de almacenamiento. Pasar de una unidad de almacenamiento rígida (H.D.D.) a una de estado sólido (S.D.D.) aumentará los tiempos de respuesta tanto de carga del sistema como acceso a la información contenida en el equipo.

También se puede pensar en la actualización de la memoria RAM. El aumento de la capacidad de la memoria RAM en un equipo, hará que más aplicaciones puedan cargarse durante la ejecución del sistema operativo, esto ayudará a tener más ventanas abiertas y/o pestañas en el navegador.

Si se consulta con un Técnico de confianza, podría revisarse la mejor opción que se ajuste a tu presupuesto y necesidades para que su equipo funcione de la mejor manera y así poder personalizar tu experiencia con Windows puede ser una buena idea, pero lo mejor es hacerlo de manera segura y confiable, utilizando las herramientas y configuraciones que Microsoft permite oficialmente.

Esperamos que éste artículo te haya sido de ayuda y evites algunos problemas mencionados anteriormente.